Menú
Las mujeres se han lanzado a abrir negocios y se observan iniciativas con más proyección internacional, según el Informe GEM 2022-2023 sobre la evolución y situación de los emprendedores en nuestro país.
La información que arroja la última publicación del Global Entrepeneurship Monitor (GEM) sobre España, afirma que es uno de los lugares donde más ha crecido la actividad emprendedora, de las 50 naciones analizadas por esta red mundial. La tasa de emprendimiento entre hombres y mujeres se ha igualado tras los años de pandemia, gracias al crecimiento de la iniciativa femenina.
En ambos sexos, la media de edad promedio de los nuevos empresarios de nuestro país oscila entre los 25 y los 42 años. El estudio señala que la motivación principal para iniciar un nuevo negocio es el autoempleo, con el objetivo de ganar más dinero o bien mejorar aspectos profesionales específicos.
De acuerdo con el documento, en los últimos años todos los emprendedores han reaccionado de forma similar a las condiciones generadas en los distintos ciclos económicos, aunque las emprendedoras han mostrado un ligero retraso. Parecen esperar un poco más de tiempo para aprovechar las oportunidades que surgieron tras las últimas crisis. Pero, desde 2021, se refleja que hombres y mujeres emprenden por igual y en 2022 ese porcentaje asciende al 6 % de la población española.
El informe del GEM indica también que las iniciativas emprendedoras recientes (TEA) están experimentando un incremento en su capacidad de internacionalización, incluyendo aquellas lideradas por mujeres. A diferencia de años anteriores, no muestran una mayor reticencia que los hombres a liderar proyectos orientados a mercados exteriores. Esto representa un aumento de la orientación internacional de las iniciativas emprendedoras lideradas por mujeres.
En cuanto al nivel educativo, entre las personas que han obtenido un máster o un doctorado, el porcentaje de empresarias es sensiblemente superior al de los hombres, especialmente en la etapa TEA. Según el documento del GEM, esto es un claro indicador de la vocación emprendedora de las mujeres altamente cualificadas en España.
En la memoria se advierte cómo, en 2022, el porcentaje femenino aumentó en todas las fases del proceso emprendedor. Es especialmente relevante el incremento de cinco décimas (del 6 % al 6,5 %) de empresarias que alcanzan la etapa de consolidación y se observa una mayor capacidad de resistencia por parte de las mujeres para permanecer en esa fase en 2022, en comparación con el año anterior.
El estudio indica que las emprendedoras suelen tener iniciativas con impacto social y medioambiental, y con servicios dirigidos a un consumidor final. Por su parte, los hombres tienen iniciativas con base más tecnológica y con servicios para empresas, fundamentalmente. En ese sentido, se observa que las empresarias se decantan por crear un negocio para marcar una diferencia en el mundo, por encima del mayor interés de los emprendedores por crear riqueza. Este empeño no se ha visto reducido para las mujeres durante los años de pandemia, a diferencia de lo que ha ocurrido en el caso masculino.