El sector agroalimentario israelí se encuentra en un proceso de cambio y apertura, gracias al cual se pretende aumentar la competencia de las importaciones y reducir así el alto coste de la cesta de la compra en el país.
El volumen de negocio del sector de la distribución de productos agroalimentarios en Israel sobrepasó los 16.000 millones de euros en 2016, cifra relativamente elevada para un país de 8,7 millones de habitantes. Las importaciones israelíes en este ámbito superaron los 5.500 millones de euros, lo que supone aproximadamente un 7,5% del total de importaciones del país hebreo.
El cuadro macroeconómico positivo del que disfruta Israel (4% de crecimiento del PIB en 2016, inflación controlada, desempleo por debajo del 5%, creciente peso del consumo interno) y una moneda local, el shekel israelí, fuertemente apreciada respecto tanto al euro como al dólar hacen que el contexto de cambio y apertura esté planteado en buenas condiciones para su éxito.
En este país mediterráneo, donde el 60% del territorio presenta un clima árido o semiárido, el marco general del sector agroalimentario se ha caracterizado por la existencia de un sistema de aranceles y cuotas de importación libres de arancel que, con el interés de proteger a los productores locales, ha favorecido el predominio de monopolios y oligopolios en el mercado interior.
La baja exposición al comercio exterior y la tendencia a la concentración en el sector han impulsado al alza el precio de los alimentos, lo que ha supuesto que desde el año 2000 estos hayan aumentado un 50%, a pesar de que el IPC muestre cifras incluso negativas en su evolución más reciente.
Este incremento de precios llegó, incluso, a generar manifestaciones reivindicativas en 2011, ya que los israelíes pagaban, de media, un 20% más por su cesta de la compra que los consumidores del resto de países miembros de la OCDE.
En un contexto marcado por las recomendaciones de la OCDE de introducir competencia en el mercado, las autoridades locales comenzaron un proceso de reforma del sector agroalimentario que se intensificó en 2016 y que, en el marco del desarrollo del Acuerdo de Asociación UE-Israel, avanza hacia una simplificación de la regulación, la disminución de aranceles, el incremento de cuotas libres de impuestos y las ayudas directas como compensación al sector del campo.
Dichas medidas ya han afectado, entre otros, a los mercados del aceite de oliva, la carne fresca de ovino o bovino, algunos pescados y conservas, y los quesos, y se espera culminen en 2017 y 2018 hasta cubrir todo el mercado agrícola, incluyendo también huevos, frutas y hortalizas frescas y congeladas.
Acceso al mercado: la certificación 'kosher'
Todos los mercados tienen sus particularidades y el mercado agroalimentario israelí se caracteriza, entre otros factores clave, por la condición kosher (o kashrut).
El kosher es la certificación que acredita alimentos y bebidas como aptos o de conformidad con los preceptos de la tradición judía. Actualmente, se estima que el 85% de los productos comercializados en el sector de la alimentación y bebidas en Israel es kosher.
En el caso de España, gracias a un convenio auspiciado desde la Secretaría de Estado de Comercio y suscrito por la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE) y la Orthodox Union (OU), nuestra empresas pueden exportar más fácilmente sus alimentos y bebidas con certificado kosher desde 2013.
Sin embargo, ciertos productos disponen de una certificación kosher más estricta, como pueden ser el vino y la carne. Paradójicamente, este certificado no es un requisito indispensable para la importación y comercialización de vino; por el contrario, la carne fresca es el único producto al que sí se le exige obligatoriamente.
Poco a poco, se van adoptando medidas que permiten que esta certificación sea menos compleja y costosa en su aplicación.
'The Cornflake Law'
Por otro lado, también eran necesarias otras disposiciones para fomentar la competencia, ya que “las cuatro mayores empresas de alimentación controlan, aproximadamente, el 40% del mercado", apuntaban en 2016 desde el Ministerio de Finanzas refiriéndose a Tnuva, Strauss, Osem y Unilever. Adicionalmente, solamente una cadena de supermercados, Tiv Taam, se diferencia por vender productos exclusivamente no kosher.
Bajo la denominada The Cornflake Law, ley para la protección de la salud pública que entró en vigor en septiembre de 2016, las autoridades locales han establecido un nuevo marco que simplifica el acceso de mercancías secas de bajo riesgo para la salud al mercado israelí.
Esta reforma afecta principalmente a productos no perecederos, como cereales, enlatados, etc., y tiene tres objetivos básicos: hacer la importación más sencilla, asimilando estándares europeos y disminuyendo las inspecciones en aduanas; favorecer la competencia, fomentando la ruptura de las estructuras oligopolísticas y otorgando licencias de importación a más operadores; y conceder más responsabilidad al importador en todo el proceso.
Esta regulación es la punta del iceberg de la reforma liberalizadora del mercado israelí, donde, a su vez, se han estado publicando nuevas normativas sobre otros sectores como recambios automovilísticos, cosméticos, equipamientos médicos, etc.
El mercado del vino en Israel
Israel dispone de cierta tradición vitivinícola como país mediterráneo; sin embargo, esta cultura no está tan arraigada como en otras economías de la zona (España, Francia, Grecia, etc.).
La producción nacional siempre ha estado muy enfocada al mercado local. Las tres bodegas de mayor tamaño dominan el 75% del segmento de vino de mesa seco producido en el país y acaparan la mayor parte de las exportaciones. Tras ellas, se concentran otras siete compañías, y en conjunto suponen casi el 90% del mercado. El 10% restante está copado por más de 200 bodegas de pequeño tamaño.
Además de la oferta que estos agentes aportan al mercado, el volumen de las importaciones vitivinícolas es creciente en Israel. Al igual que ocurre en el resto del mundo, estas proceden de los países más importantes del sector a escala mundial: Francia (26%), Italia (25%) y España (15%), EE.UU. (7,24%) y Chile (5,22%).
Este mercado, con un elevado grado de competencia y ciertos síntomas de saturación, continúa absorbiendo poco a poco nuevos vinos, tanto nacionales como internacionales, para lo que es indispensable un posicionamiento adecuado del producto. Los vinos españoles tienen oportunidad de competir gracias, entre otras cosas, a su buena relación calidad-precio.
El mercado de la carne en Israel
La carne de origen bovino y ovino representa en torno a un 8% de la producción agrícola y ganadera de Israel. La limitada producción local y una creciente demanda de carne fresca hacen que este sector se enfoque principalmente a la importación (en 2016 atendió un 40% del consumo local con producción exterior).
El mercado de la carne fresca de vacuno se caracteriza por estar muy concentrado. Otras trabas añadidas son los elevados costes de la importación de carne, derivados de los derechos de aduana; la dificultad de encontrar mataderos con la certificación rabínica kosher en el extranjero; los costes de transporte y los costes de formación del matadero en el exterior.
La carne de origen bovino importada procede, principalmente, de Polonia, Uruguay y Argentina; y la carne de origen ovino de Australia y Chile.
El sistema de supervisión de procedencia de la carne en Israel exige que los mercados de origen sean autorizados oficialmente. España está autorizada para ser proveedora de carne fresca de ovino y bovino, dentro una lista restringida de países. Ello, junto a una reducción progresiva de los aranceles de importación, un incremento paulatino de las cuotas de importación libres de aranceles y un posible aumento de la vida de anaquel aceptada en este mercado presentan este mercado como una oportunidad para los exportadores españoles de carne.
Exportaciones agroalimentarias españolas a Israel
Las ventas españolas de productos agroalimentarios al mercado israelí han seguido una tendencia alcista en los últimos años, pasando de un volumen cercano a los 68 millones de euros en 2012 a 105,3 millones en 2016, un dato que representa un repunte del 55%.
Las frutas secas y congeladas y las conservas hortofrutícolas son los conceptos de mayor relevancia entre las exportaciones de origen vegetal, con 5,2 y 7 millones de euros, respectivamente, en 2016. Además, el aceite de oliva español ha logrado consolidar su posición en el mercado israelí, que también es productor, con unas ventas que en 2016 superaron los 14 millones de euros, lo que supone el mejor dato de la serie histórica.
Asimismo, destaca por su evolución en los últimos años el huevo (tanto de mesa como para incubar), cuyos datos de exportación anual se sitúan cerca de los 10 millones de euros.
Finalmente, hay que hacer referencia a los productos de azúcar, confitería, galletas, panadería y pastelería, ya que en 2016 se exportaron más de 25 millones de euros por estos conceptos, un 60% más que en 2012.
Perspectivas optimistas
A pesar de que, en ocasiones, se plantean dificultades de entrada (como es la necesidad, en la mayoría de ocasiones, de respetar la normativa kosher o su sistema de importación por cuotas), Israel ofrece unas buenas perspectivas de desarrollo para el sector agroalimentario pues, además del proceso de reforma comprometido por las autoridades, se estima que la tasa de crecimiento de la población permitirá alcanzar los 12 millones de habitantes en 2035.
El interés por el producto español, si bien es menor que el que genera el producto francés e italiano (con grandes campañas de promoción), va en aumento, en muchas ocasiones vinculado a la cultura gastronómica española y al turismo (más de 350.000 israelíes visitaron España en 2016).
España ya dispone de una imagen positiva en el mercado israelí derivada de la comercialización de productos como el vino, las frutas, la carne, el aceite o las conservas, que debe animar a un refuerzo de la marca país a la hora de exportar estos y otro tipo de productos a este mercado.
ÁGUEDA QUINTÁNS. OFICINA ECONÓMICA Y COMERCIAL DE LA EMBAJADA DE ESPAÑA EN TEL AVIV
Principal feria
ISRAFOOD
Tel Aviv
Próxima edición: del 28 al 30 de noviembre de 2017
Organizador: Stier Group Ltd.
expo@stier-group.com
Documentación
El mercado de la carne de origen bovino y ovino en Israel
Ed. Ofecomes Tel Aviv, diciembre 2016, 34 págs., en español
El mercado del vino en Israel y Territorios Palestinos
Ed. Ofecomes Tel Aviv, agosto 2016, 39 págs., en español
El mercado de lácteos en Israel
Ed. Ofecomes Tel Aviv, mayo 2015, 36 págs., en español
El mercado de los huevos en Israel
Ed. Ofecomes Tel Aviv, febrero 2015, 23 págs., en español
Simulador de costes de establecimiento ICEX: Israel
A continuación presentamos un extracto de la información que ofrece la herramienta “Simulador de Costes de Establecimiento” del ICEX. Si quiere consultar con detalle los costes de constitución de una sociedad, inmobiliarios, laborales, fiscales, de suministros o el coste de vida para expatriados en más de 100 mercados, pinche aquí. También puede realizar simulaciones de la implantación de su empresa en un mercado, obteniendo el resultado en ese país y en otros comparables.