09/07/2021

El consejero económico y comercial de la Embajada de España en Moscú, Pablo Martínez Segrelles, analiza la situación actual, los desafíos y las oportunidades del sector de los productos de alimentación gourmet en Rusia, y describe varias iniciativas desarrolladas para facilitar el acceso a este mercado.

EL EXPORTADOR: ¿Cuáles son las características principales del sector gourmet en Rusia en la actualidad?
PABLO MARTÍNEZ SEGRELLES: Una de las principales características es su alta concentración geográfica, ya que Moscú representa prácticamente dos tercios del mismo y San Petersburgo otro 10%, con lo que tres cuartas partes del mercado se concentran en estas dos ciudades.

Por tanto, si bien la imagen país y la autenticidad de los productos son muy valorados, cada vez es más importante destacar en cuanto a la calidad de los mismos y prescindir de aditivos artificiales o ingredientes que se perciban como poco saludables.

EE: ¿Dónde se encuentran las mejores perspectivas de negocio para las empresas españolas en este campo?
PMS: Debido a las restricciones impuestas como contramedidas a las sanciones de la UE tras la anexión de Crimea por Rusia, las oportunidades se concentran necesariamente en los productos que no están sometidos a estas limitaciones.

Entre ellas, destacan el aceite de oliva y las aceitunas españolas, gracias a su reconocimiento en el mercado local. No obstante, si bien en términos generales la oferta española domina en estos productos, en el ámbito puramente gourmet está siendo adelantada por competidores italianos o griegos. Esto es algo que debemos tratar de recuperar, ya que se trata de un sector con elevada rentabilidad y posibilidades de crecimiento.

Por ese motivo, creemos que es muy importante apoyar este segmento de alta calidad y, para ello, este año hemos reconvertido la tradicional Semana del Vino Español en Rusia en Semana del Vino y los Alimentos de España, ampliando así el público objetivo para dar a conocer mejor nuestra oferta, especialmente gourmet.

Más allá de estos subsectores tradicionales, uno de los segmentos que más está creciendo es el de las conservas vegetales. En este caso, las mejores opciones están en los productos más característicos y diferenciales de nuestra gastronomía, pues un rasgo del sector gourmet aquí es la originalidad y buena presentación del producto para diferenciarse de las conservas tradicionales rusas.

También el de la confitería es un subsector en el que las importaciones están aumentando y la oferta española está bien posicionada para aprovechar esta evolución, como está haciendo el turrón de alta calidad, si bien todavía tiene una cuota modesta.

Por otro lado, entre las especias y condimentos destacan el azafrán y el pimentón españoles, que disfrutan de reconocimiento y demanda en el mercado. Asimismo, el agua embotellada y otras bebidas no alcohólicas también tienen cabida y potencial, aunque actualmente su presencia es muy inferior a la de marcas francesas o italianas.

Por último, quiero hacer una mención al vinagre de Jerez, con un nivel de ventas muy elevado en Rusia y con amplias posibilidades para posicionarse como producto gourmet de nicho frente al muy extendido vinagre balsámico. Muestra de su potencial es el éxito de la cata de vinagres híbrida (presencial-virtual) que organizamos recientemente para el Consejo Regulador de Jerez, pues despertó un notable interés entre los importadores rusos.

EE: ¿Se ha producido algún cambio reciente en cuanto a las restricciones y prohibiciones a la importación que afecte a los productos gourmet españoles?
PMS: No ha habido ningún cambio desde la imposición de “restricciones políticas” en 2014. Sin embargo, creo que es muy importante diferenciar bien estas de las “restricciones sanitarias” de 2013 con las que se solapan. En muchos casos, existe confusión entre unas y otras, que hace que muchas empresas españolas pierdan mercado innecesariamente, por desconocimiento o por falta de comprensión de esta diferencia.

El organismo supervisor de la salud animal y fitosanitaria, Rosseljoznadzor, retiró en 2013 la autorización para exportar a la mayoría de los establecimientos españoles de productos de origen animal, a causa de la pérdida de confianza en nuestros servicios de supervisión veterinaria. Esta restricción, no obstante, es perfectamente salvable y se podría superar ofreciendo garantías de supervisión eficiente al Rosseljoznadzor.

Sin embargo, antes de resolverse este problema técnico, en 2014 entraron en vigor las restricciones “políticas” en respuesta a las sanciones de la UE por la anexión rusa de Crimea y Sebastopol. Estas implican la prohibición de introducir frutas y hortalizas, carne, pescado y lácteos procedentes de los países de la UE.

Pues bien, muchas empresas españolas desistieron de solventar el problema “técnico”, salvable, al entender que se superpone el “político”, insalvable. No obstante, hay dos categorías de productos que están afectadas por las restricciones “técnicas” pero no por las “políticas”: conservas de pescado y marisco, y otras preparaciones de carne.

En estos casos, sí que sería posible restablecer la exportación a Rusia y, de hecho, Italia nunca ha dejado de exportar legalmente anchoas y otras conservas y preparaciones de carne, aun siendo un Estado miembro de la UE.

Por el contrario, España dejó de exportar en 2013 pulpo cocido, bonito del norte, zamburiñas, calamares en su tinta, berberechos y otros productos. Aunque podría retomar estas exportaciones, todavía no lo ha hecho, por lo que animo a las empresas españolas de estos sectores a iniciar los trámites necesarios para reanudar estas ventas.

EE: ¿Cómo pueden superarse estos retos que presenta el mercado ruso?
PMS: Para los sectores afectados por las prohibiciones de importación, la única -pero generalmente rentable- manera de superarlas es mediante la inversión productiva en Rusia. Las propias características del mercado, así como las medidas de apoyo de los Gobiernos federal y regionales, hacen muy atractivo este tipo de inversión en la industria agroalimentaria, así como la exportación de equipamiento para empresas rusas del sector, que están acometiendo significativas inversiones.

Relacionado también con esto, es importante informarse acerca de los requisitos técnicos, sanitarios y fitosanitarios, para lo que la Oficina Económica y Comercial (Ofecomes) en Moscú está a la entera disposición de las firmas españolas.

Más allá de las prohibiciones de importación, el mayor reto que tiene el mercado ruso es su conocimiento. Precisamente, para conocer el mercado, y darse a conocer en él, se abren unas excelentes oportunidades con las actividades de promoción del sector.

EE: En este sentido, ¿qué pasos podría seguir una empresa especializada española que se plantee una primera toma de contacto con este mercado?
PMS: El sector de alimentación y vinos recibe una especial atención en nuestra producción de notas sectoriales y estudios de mercado, de acceso gratuito, por lo que les animaría a consultarlos. Y, por supuesto, si necesitasen más información o apoyo en cualquier fase de la exportación, también pueden contar con nosotros.

Pero más allá de informarse a distancia, para una primera toma de contacto sin duda recomendaría la participación en la feria PRODEXPO, en la que siempre organizamos un pabellón oficial del ICEX. A esta feria asisten los principales actores del sector no solo de Moscú, sino cada vez más de toda la Federación Rusa y de otras repúblicas vecinas, por lo que supone una cita esencial.

También la ya mencionada Semana del Vino y los Alimentos de España presenta otra oportunidad de oro para dar a conocer el producto y familiarizarse con los actores principales del mercado local.

Superada esta primera toma de contacto, es imprescindible encontrar un distribuidor-importador, pues es la figura que se ocupará de la certificación del producto como paso previo a su comercialización, ya que un productor extranjero sin establecimiento en Rusia no puede certificarlo, y será el importador-distribuidor el que deberá pagar los aranceles y el IVA en la importación en aduana.

EE: ¿Qué apoyos pueden encontrar las empresas españolas que decidan acceder al mercado gourmet de este país?
PMS: Desde la Ofecomes en Moscú prestamos apoyo a las empresas a lo largo de todas las fases de inmersión en el mercado ruso. Las oportunidades más destacadas para acceder al mercado gourmet son: la ya mencionada feria PRODEXPO, en la que el ICEX ha mantenido ininterrumpidamente un pabellón oficial incluso a pesar de la pandemia, y la Semana del Vino y los Alimentos de España en Rusia.

Respecto a esta última, este año se ha retomado la promoción de los alimentos, que se había suspendido desde 2013, precisamente porque vemos que existen todavía interesantes oportunidades más allá de los sectores sujetos a prohibición de importación. Así, este año está previsto organizarla de manera presencial en tres ciudades rusas: Moscú, San Petersburgo y Sochi.

Habrá un salón en el que se expongan los productos españoles y varios seminarios en cada ciudad, tanto de vinos como de alimentos, en los que se profundizará en el conocimiento de nuestro sector para los profesionales rusos. Se espera que asistan más de 1.000 profesionales, incluso tras la preselección y el filtrado que hacemos desde la Ofecomes para garantizar la asistencia de un público estrictamente profesional y enfocado a la importación de estos productos.

Además, para superar las limitaciones que imponen las todavía vigentes restricciones de viaje entre ambos países, en la Ofecomes estamos realizando seminarios y catas híbridas virtuales-presenciales, que están recibiendo una muy buena aceptación por parte de los importadores y profesionales rusos.

Precisamente, una de las actividades previstas para este año es una cata híbrida de productos gourmet españoles, en la que se invitará a los importadores y profesionales a asistir presencialmente a una degustación en la sala de conferencias de nuestra oficina, que será presentada por el productor español mediante una videoconferencia interactiva.
JAVIER GARCÍA CUESTA