Australia

Según Sydney Water Corporation, la mayor empresa de servicios de agua de Australia, actualmente el 80% de las aguas residuales del área metropolitana de Sídney se expulsan al mar después de solo un uso. Esto, junto a la experiencia vivida durante la sequía que tuvo lugar entre 2017 y 2020, ha llevado al Gobierno de la ciudad a buscar suministros de aguas alternativos.

Si bien las ciudades y pueblos australianos se sienten cada vez más cómodos con la idea de introducir las aguas recicladas purificadas (PRW, por sus siglas en inglés) en su suministro de agua, expertos indican que la educación sobre el agua en Australia todavía debe mejorar. La escasa implementación de este tipo de soluciones se debe principalmente a la falta de apoyo público más que a una limitación de la ciencia o experiencia técnica. Una de las principales preocupaciones identificadas entre la población es la de la limpieza y seguridad del uso de agua purificada para consumo.

En los últimos años, las conversaciones sobre el agua purificada en Australia han sido un tema recurrente de debate. En este sentido, es importante resaltar la relevancia de la educación y de la consulta a la comunidad a la hora de eliminar las posibles preocupaciones existentes entre la población, las cuales pueden suponer una barrera para la aplicación de soluciones sostenibles en futuras situaciones de sequía.

Según una encuesta nacional liderada por Aurecon, empresa internacional de diseño e ingeniería, ocho de cada diez australianos creen que es importante considerar fuentes de agua alternativas para mejorar la seguridad hídrica de Australia. El principal factor de aceptación de fuentes de agua alternativas en las comunidades australianas es el haber experimentado previamente una situación de escasez de agua y haber tenido experiencias previas con fuentes de agua alternativas. En este sentido, los encuestados de la región de Orange, por ejemplo, demostraban una mayor predisposición ante la idea de incluir agua purificada en el suministro de agua para el consumo que otras regiones donde las consecuencias por las sequías no resultaron tan severas.

Existen gran cantidad de ejemplos de ciudades alrededor del mundo que llevan más de cincuenta años utilizando agua reciclada purificada de manera segura. Dentro de Australia, Perth es un buen ejemplo de cómo debería abordarse este proceso de cambio. La educación continua y consistente de la población sobre la utilización de aguas recicladas es fundamental para conseguir introducir este tipo de soluciones innovadoras que garanticen los suministros hídricos para las futuras generaciones.