Ambas firmas destacan en sus comunicados que los factores clave para esta mejora en su evaluación descansan en el crecimiento anual medio del PIB (el 4,9 % en 2018 respecto al ejercicio anterior), el aumento del volumen de las exportaciones, la reducción de la deuda pública externa -la cual se prevé que siga disminuyendo-, el repunte de la inversión extranjera directa (IED) y las transferencias de capital procedentes de la Unión Europea.
Las dos entidades coinciden en señalar que la calificación crediticia mejorará a lo largo del tiempo si la economía húngara sigue creciendo de manera estable, se sigue reduciendo la deuda externa más de lo previsto y el Gobierno consigue alcanza un superávit presupuestario.
La agencia japonesa de calificación crediticia R&I mejora la nota de Hungría