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La pandemia del coronavirus y el sector inmobiliario lastran el desempeño económico chino
Los últimos datos oficiales sobre 2022 registran un crecimiento del 3% durante el año pasado, uno de los más bajos en 40 años.
La compañía de seguros de crédito interior y a la exportación Crédito y Caución prevé que el crecimiento del PIB del país asiático se sitúe en el 4,2% en 2023. También considera probable que el crecimiento de las exportaciones siga siendo reducido tanto este año como el próximo, debido a la ralentización de las economías desarrolladas.
En el complicado contexto internacional, China se enfrenta además a los esfuerzos de Estados Unidos por restringir su acceso a la tecnología y a un endurecimiento monetario mundial, aunque su inversión empresarial cuenta con un importante apoyo gubernamental.
Por tanto, el crecimiento previsto para este año descansaría en la recuperación del consumo de los hogares y en la fortaleza de los estímulos fiscales, pero también se mantendría la incertidumbre sobre la evolución de la pandemia del coronavirus y las respuestas de la Administración para hacerla frente, además de los problemas del sector inmobiliario, que suponen actualmente uno de los principales riesgos para la economía local.
Crecimiento en 2022
Precisamente, estos dos factores son razones principales para explicar el “mal desempeño” de la economía china durante el año pasado. En este sentido, la Oficina Nacional de Estadística de China publicó hace unos días los últimos datos oficiales sobre la evolución del PIB del último trimestre de 2022 y de todo el año completo, que arrojaron un crecimiento interanual del 2,9% para ese cuarto trimestre y del 3% en todo 2022.
Esta cifra anual es la peor desde la contracción del 1,6% experimentada en 1976, si descontamos el primer año de la crisis del coronavirus, que registró un aumento registrado del 2,2%. No obstante, los datos del último trimestre son mejores que los promedios anticipados por los analistas, lo que corrobora un cierto optimismo para 2023.
“La buena noticia es que ahora hay señales de estabilización, ya que la política de apoyo adoptada hacia finales de 2022 se evidencia en la relativa resiliencia de la inversión en infraestructuras y el crecimiento crediticio”, señaló al respecto la economista de Oxford Economics Louise Loo.
Por otra parte, la oficina de estadísticas china también reveló que la población del país se redujo en 2022 por primera vez desde 1961, pues perdió unos 800.000 habitantes frente al año anterior y contabilizó 1.411,8 millones de ciudadanos.