01/02/24
Un problema visual de su madre, que derivó en una enfermedad neurodegenerativa, la llevó a buscar una solución avanzada para el diagnóstico de la vista. Aquel revés vital fue el germen de un sistema pionero en el mundo que realiza una evaluación en apenas 15 minutos.
Eva García Ramos es ingeniera de telecomunicaciones, empresaria y directiva de varias compañías. A día de hoy, invierte gran parte de su tiempo en el desarrollo de WIVI Vision, un mecanismo para modernizar el proceso diagnóstico de las disfunciones visuales con la ayuda de la inteligencia artificial y el big data. Además, también sirve para entrenar la función visual de las personas con alguna carencia. “Lo que hacemos en WIVI es trabajar la parte funcional de la visión. Somos como el fisio de los ojos”, subraya una de sus responsables.
Esta solución se comercializa ya en más de 70 centros de salud visual de toda España, y la compañía de Eva García Ramos ha llegado a alianzas con firmas especializadas como General Óptica para seguir creciendo. Pero, tanto ella como su socio, Juan Carlos Ondategui-Parra, tienen la vista puesta en los mercados internacionales. Entre sus objetivos están los Estados Unidos, donde ya han despertado el interés de algunas empresas locales, y el Reino Unido.
Eva García Ramos apuesta por el talento femenino, pero reconoce que se encuentra con muchos problemas para incorporar mujeres con perfiles técnicos, como programadoras. “En la parte de programación pura y dura nos cuesta encontrar chicas. Pero, bueno, intentamos dar oportunidades a la capacidad individual porque, al final, depende del potencial de esa persona”, concluye la CEO de WIVI Vision.
Descubre más sobre Eva García Ramos en esta entrevista.