Las energías renovables tendrán un gran desarrollo en Austria

07/07/2020 Der Standard

Una nueva ley austriaca promueve que la energía adicional necesaria para 2030 sea renovable.

En Austria, un proyecto de ley para el desarrollo de las energías renovables (Erneuerbare Ausbau Gesetz, EAG) marca el futuro rumbo de la energía verde. El país consume actualmente un total de energía de 71 200 millones de kilovatios hora (kWh) al año y para 2030 serán necesarios 27 000 millones de kWh adicionales. Esta cantidad de energía adicional deberá ser generada a partir de fuentes renovables – además de la producción ya existente de energía eólica, solar, biomasa y pequeñas hidroeléctricas.

La nueva ley de desarrollo de las energías renovables (EAG) entraría en vigor a principios de 2021, con el objetivo de que el 100% de las necesidades energéticas de Austria sean cubiertas con este tipo de energías verdes en 2030. Para la energía adicional necesaria, 11 000 millones de kWh se producirán a partir de energía fotovoltaica, 10 000 millones de kWh de energía eólica, 5 000 millones de kWh de energía hidroeléctrica y 1 000 millones de kWh de biomasa.

El caso de la energía eólica es especialmente destacable, ya que actualmente suministra la mayor parte de la electricidad adicional necesaria. Según IG Windkraft, los rotores eólicos generaban en 2018 cerca de 7 000 millones de kilovatios hora de electricidad.

Para lograr el objetivo de 2030, es necesaria la instalación de turbinas de viento en lugares donde aún no hay ninguna. La nueva ley para el desarrollo de las energías renovables (EAG) se revisará durante el mes de julio. Y según informa el diario Der Standard, no ha sido acogida por igual en todo el territorio. Se requiere una mayoría de dos tercios para una decisión en el Consejo Nacional y el Consejo Federal, lo que está provocando un feroz tira y afloja entre partidos políticos y otros grupos de interés.

Por lo tanto, habría que generar 27 000 millones de kWh adicionales de electricidad limpia para frenar el crecimiento de la demanda de electricidad para 2030 y llevar la producción de electricidad de fuentes fósiles a casi cero, con la correspondiente reducción de emisiones de CO2. Solamente el viento, según los cálculos de Österreichs Energie, podría suministrar 10 000 millones de kWh adicionales.
Sin embargo, para que el proyecto se haga realidad, son necesarios algunos ajustes, tal y como apunta el director general de IG Windkraft, Stefan Moidl. Esto incluiría un sistema de tarifas diferenciadas según el territorio, es decir, los operadores de los emplazamientos con buenos rendimientos eólicos deberían recibir menos apoyo y los que presenten menores rendimientos deberían poder contar con más ayudas. Actualmente, la tasa uniforme de subsidios ha dado lugar a una fuerte expansión de la energía eólica en el este de Austria, pero apenas o nada en otras partes del país.

En Alta Austria, que en su día fue una región pionera en materia de energía eólica, ya no se permite la construcción de este tipo de turbinas debido a una ley provincial para la conservación de la naturaleza. El proyecto de un parque eólico en el Stubalm en Estiria se ha convertido recientemente en un caso para el tribunal administrativo, y parece que la producción de energía eólica también está siendo problemática en otros lugares.

Según datos de Advantage Austria, en comparación con la UE, Austria ocupa el primer puesto en el porcentaje de energía renovable en la producción de electricidad y en términos del área del país. Las energías renovables son cada vez más importantes en el suministro total y la voluntad política, junto con una gran inversión en I+D, favorecen esta tendencia y generan un gran saber hacer y una excelente competencia en el ámbito de la energía renovable en Austria.

Este objetivo para 2030 supone un gran desafío para Austria y el país necesitará infraestructuras, como la expansión de las redes y sistemas de almacenamiento, pues la seguridad del suministro es un requisito previo importante para la generación de fuentes de energía renovables.