En la actualidad, la reforma avanza y podría ser aprobada este mismo 2021 lo que ayudaría a la recuperación del mercado de bebidas alcohólicas y, en especial, a los productos gourmet como vinos y licores de origen español.

En la práctica, el impuesto actual fomenta que las bebidas de calidad con elevado precio paguen más impuestos que las de baja calidad, además que fomenta el fraude para declarar un menor valor de venta y así pagar menos impuestos. Esto aparece reflejado en el caso de las cervezas, donde una marca industrial de precio bajo pague 2 pesos por botella, mientras que una cerveza artesanal, pese a tener el mismo grado de alcohol paga de 10 a 15 pesos de impuesto solo por tener un precio más elevado. De esta manera con la actual ley basada en el impuesto sobre el valor de venta propicia la compra de bebidas baratas de producción industrial y perjudica a los productos de calidad que tienen un segmento de precios mayor.

De este modo, la nueva propuesta de ley cambiaría los precios de varias bebidas. Por ejemplo, las cervezas artesanales con bajo contenido de alcohol, ahora pagarían menos IEPS, mientras que una cerveza industrial con más alcohol pagaría más impuestos. Por el contrario, un vino de 750 mililitros con 13 grados de alcohol que ronda en 200 pesos contribuiría con 13,65 pesos de IEPS en lugar de 36 que paga ahora, haciéndolo más competitivo al vino y a otras bebidas gourmet, de las cuales España es gran importador en México.

El gremio de importadores de productos gourmet, aplaude esta nueva reforma ya que supone un gravamen más justo para las bodegas artesanales de licores, vinos y demás bebidas, además que impide el fraude para pagar menos impuestos, tal y como informa El Economista. En este sentido, José de Lucas, director general de la Asociación de Importadores y Representantes de Alimentos y Bebidas (Airabac), declara que el esquema actual incentiva la ilegalidad ya que muchos productos buscan declarar valores inferiores a los que realmente tienen y así pagar fraudulentamente menos impuestos. Iñaki Landáburu, presidente de la Asociación Nacional de Distribuidores de Vinos y Licores (ANDIVYL), opina que el 43% de bebidas alcohólicas que se venden pagan un IEPS que no les corresponde.

Si bien la Ley está en sus últimos pasos para llegar a ser aprobada, su puesta en vigor será un paso adelante para tener en México un gravamen que permita a las importaciones de este tipo de productos procedentes de España jugar en igualdad de condiciones con otras alternativas de consumo, al mismo tiempo que el vino y otros productos pasarán a tener precios más atractivos para el consumidor local.